Un despojo de latidos sobre el lecho,
cual criatura feroz
que ha preservado sus instintos.
Paloma sensual entre tus manos
y una pluma girando sobre el nido.
Cuando te tengo en mis brazos
eres serpiente alada,
fecundo pájaro prisionero
entre mis venas,
lobo semental sobre mi vientre
o una lágrima de savia en mi ombligo.
En ternura y violencia,
los temblores,
hacen de la entrega un paraíso
para juntos morir esa muerte sublime
que nos mantiene genital
y amorosamente vivos.
Deseo arrancar todas las hojas
de aquel libro que escribiste antes de ser mío.
Habitar en tus cansancios secretos
para curarlos con íntimos amores.
Dormir en la cima de tus besos
y unirlos a los vuelos de mis manos.
Abrir mis piernas derrotadas
en abrazos celestiales de dulzura.
Entregarte mi cuerpo desquiciado
transformada en seno submarino.
Y seguir perdida entre tus brazos,
mudos los dos, de sentimientos.
Saciados de luces matinales.
Estremecidos
por un presente azul
que nos ha trascendido.
ANY CARMONA
